En una reciente demanda presentada en el Tribunal de Circuito de Hawái, un inversor y un corredor de bienes raíces han interpuesto acciones legales contra Shohei Ohtani, la estrella de los Dodgers de Los Ángeles, y su agente, Nez Balelo. Los demandantes alegan que Ohtani y Balelo contribuyeron a su despido de un proyecto de desarrollo inmobiliario de lujo valorado en 240 millones de dólares en la costa Hapuna de la Isla Grande, donde habían sido contratados para respaldar la iniciativa.
La demanda sostiene que Balelo exigió cada vez más concesiones al promotor Kevin J. Hayes Sr. y a la agente Tomoko Matsumoto, a oponerse a su participación en el proyecto, que había sido concebido por los demandantes. Se argumenta que Ohtani y Balelo utilizaron su influencia como celebridades para desestabilizar y eventualmente eliminar a los demandantes del acuerdo, movidos únicamente por intereses financieros.
Además, la demanda menciona que también intentaron socavar los intereses de los demandantes en un segundo proyecto inmobiliario cercano. Se les acusa de interferencia ilícita y enriquecimiento injusto. El alegato principal se centra en el abuso de poder y en la violación de normas contractuales, reclamando que tanto Ohtani como Balelo deben rendir cuentas por sus acciones.
El portavoz de la agencia de Balelo, CAA Baseball, optó por no hacer comentarios al respecto, y no se obtuvo respuesta inmediata de los directivos de Kingsbarn Realty Capital. La demanda subraya la importancia de que las normas de trato justo y responsabilidad contractual se apliquen equitativamente a todos, independientemente de su estatus de celebridad.