Carlos Alcaraz reafirmó su dominio sobre Jannik Sinner al vencerlo 6-2, 3-6, 6-1, 6-4 en la final del US Open, logrando así su segundo título en este torneo y el sexto en total en Grand Slams. Este fue el tercer enfrentamiento consecutivo entre ambos en finales de Grand Slam, demostrando la rivalidad emergente entre estos dos jóvenes talentos del tenis.
El evento tuvo la particularidad de contar con la presencia del presidente Donald Trump, quien generó una mezcla de aplausos y abucheos durante su aparición. La partida comenzó con un retraso debido a la llegada de miles de aficionados que estaban en fila, lo que pudo haber afectado a Sinner, el actual campeón y cabeza de serie número 1 del torneo.
A lo largo del partido, Alcaraz mostró un rendimiento superior desde el inicio. Esta victoria no solo le permite a Alcaraz aumentar su ventaja en el récord de enfrentamientos directos con Sinner, sino que también le permite despojar a Sinner del primer puesto en el ranking mundial.
Ambos jugadores han dominado el circuito de Grand Slam en los últimos tiempos, habiendo ganado los últimos ocho títulos consecutivos entre ellos, lo que resalta su condición como los principales talentos del tenis masculino contemporáneo. Este partido también marcó un hito en la historia del tenis, siendo la primera vez que los mismos dos hombres se enfrentaron en tres finales de Grand Slam en una misma temporada.