La desaparición de Juan José Coazozon Beltrán y su familia en Nuevo Laredo, Tamaulipas, es un caso alarmante que ha generado preocupación. El hecho de que un oficial activo de la Guardia Estatal y ocho miembros de su familia, incluidas tres niñas menores, hayan desaparecido sin dejar rastro es sumamente grave. La denuncia fue presentada por su hermana después de que ella notara su ausencia. La falta de pronunciamientos por parte de las autoridades estatales, incluyendo al gobernador Américo Villarreal y la Secretaría de Seguridad Pública, añade un matiz de incertidumbre y angustia a la situación.
Este tipo de casos resalta el problema de la desaparición forzada en México, especialmente en estados como Tamaulipas, que enfrentan altos índices de violencia y criminalidad. Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, el número de personas desaparecidas en el estado es alarmante, lo que refleja una crisis humanitaria y de seguridad en la región.
La comunidad y los afectados esperan que las autoridades actúen con prontitud para esclarecer este hecho y encontrar a los desaparecidos, así como también para abordar la problemática más amplia de las desapariciones en el país.