La situación de la movilidad urbana en México ha empeorado significativamente debido a un rápido aumento en el número de vehículos en circulación, combinado con las recientes lluvias que han afectado las condiciones de las vías. Según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), entre mayo de 2020 y mayo de 2025, el registro total de automóviles pasó de aproximadamente 34.4 millones a 38.9 millones, lo que refleja un incremento anual de casi 900 mil unidades. Esta cifra se traduce en más de 2,460 automóviles nuevos por día.
El crecimiento no se limita solo a automóviles particulares; el parque vehicular de camiones para pasajeros también ha visto un aumento significativo, pasando de 461 mil a más de 1.3 millones, lo que representa un incremento de casi 880 mil unidades. Asimismo, el número de camiones y camionetas de carga creció de cerca de 10.9 millones a 12.2 millones, sumando alrededor de 1.3 millones de vehículos nuevos. Las motocicletas, por su parte, presentaron un aumento notable, pasando de 5.3 millones en 2020 a casi 7.8 millones en 2023.
Este drástico incremento en el parque vehicular ha llevado a diversas consecuencias negativas, incluyendo el caos vial y problemas de salud relacionados con la contaminación y el estrés asociado a la congestión del tráfico. Las autoridades y la población en general se enfrentan al reto de gestionar esta movilidad urbana en una nación donde el uso excesivo del automóvil está afectando la calidad de vida de los ciudadanos.