El escándalo en torno a la asignación del contrato para la tarjeta "Corazón de Mujer" en Morelos ha suscitado críticas debido a que la Secretaría de las Mujeres, bajo la dirección de Clarisa Gómez Manrique, parece haber tomado decisiones favorables hacia una sola empresa, Servicios Broxel, cuya propuesta ha sido la única que sigue en pie tras la descalificación de las otras concursantes.
La controversia se intensifica por el hecho de que el anuncio de la entrega de las tarjetas se realizó antes de que se formalizara la adjudicación del contrato. El proceso de licitación, que tuvo lugar el 29 de mayo, incluyó a tres empresas: Servicios Broxel, Toka Internacional y Previsión del Trabajo. Sin embargo, esta última fue descalificada debido a la omisión de documentos esenciales.
Por su parte, Toka Internacional fue descalificada por un problema con su certificación ISO, a pesar de que el documento es vigente. Esto dejó a Servicios Broxel como la única opción viable, a pesar de que Toka había ofrecido bonificaciones que habrían representado un ahorro para el gobierno estatal. La propuesta de Servicios Broxel incluye una comisión del 3.2% sobre el total del contrato, lo que significaría una ganancia de aproximadamente 3 millones 991 mil pesos.
La formalización del contrato está programada para el 16 de octubre, pero la distribución de las tarjetas comenzó antes, lo que añade más cuestionamientos sobre la transparencia y la legalidad del proceso de contratación. Este tipo de situaciones generan preocupación acerca de la correcta gestión de recursos públicos y la competencia justa entre proveedores en los contratos gubernamentales.