La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, ha minimizado las agresiones sufridas por los manifestantes en la reciente marcha de la Generación Z, afirmando que no hubo hospitalizados ni desaparecidos entre ellos y que las acciones de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) fueron solo de "contenimiento". En su declaración, Brugada subrayó que varios policías resultaron heridos durante los incidentes.
Además, Brugada descalificó el movimiento de la Generación Z, catalogándolo como una "narrativa falsa" y alegando que no se presentó un gran número de jóvenes ni causas legítimas durante la protesta. Según ella, los mensajes escuchados estaban cargados de "violencia y odio", lo que sugiere que, a su parecer, esta movilización no representaba un verdadero clamor de la juventud. La jefa de Gobierno también reafirmó su compromiso de no permitir la represión y condenó los actos de violencia ocurridos en el marco de la movilización, expresando su apoyo hacia los elementos de seguridad.