El reciente asesinato de Noelia Daylen, una niña de 4 años, ha generado una respuesta significativa del gobierno de Oaxaca, encabezado por Salomón Jara Cruz. A pesar de la afirmación del gobierno de que Oaxaca es uno de los estados más seguros de México, la tragedia ha llevado a la solicitud de apoyo federal, con el envío de más de 500 elementos de diversas corporaciones policiales al Istmo de Tehuantepec para reforzar la seguridad en la región.
La Fiscalía General de Oaxaca (FGEO) ha continuidad a la Operación Sable, realizando cateos nocturnos en Juchitán que resultaron en la detención de siete personas presuntamente vinculadas a una célula delictiva llamada “Los Cromos.” Durante estos operativos, se llevaron a cabo ocho órdenes de cateo en distintas localizaciones estratégicas, centrándose en delitos tales como narcomenudeo, homicidio calificado y extorsión.
Ante la gravedad de la situación, las autoridades han decidido trasladar a dos de los detenidos a la capital del estado para llevar a cabo indagatorias más detalladas que ayudarán a desarticular esta organización criminal. Las acciones se basan en un enfoque para refrescar la seguridad en el Istmo y prevenir más delitos en la zona.