La situación en la planta cementera de la Cooperativa Cruz Azul en Tula refleja una lucha interna significativa por el control de la cooperativa. La detención de Federico Sarabia Pozo, quien es identificado como líder de uno de los bandos en conflicto, resalta el nivel de tensión y violencia que ha surgido en medio de esta disputa. Sarabia, alineado con el exdirector general Guillermo "Billy" Álvarez, había estado tratando de protegerse de una posible captura mediante recursos legales como amparos.
La planta en Tula no solo tiene importancia económica, sino que también es simbólicamente el lugar donde se originó el Club Deportivo Cruz Azul en 1927, lo que añade una capa de significado a la disputa. La división en la cooperativa ha llevado a enfrentamientos violentos, evidenciando que la lucha por el control no es solo una cuestión de administración, sino que ha escalado a niveles de confrontación física.
La falta de información por parte de las autoridades sobre los delitos específicos que se le imputan a Sarabia mantiene un aire de incertidumbre sobre la situación legal y los posibles desarrollos futuros en este conflicto. Mientras tanto, el otro grupo, liderado por Víctor Velázquez, continúa manteniendo el control sobre diversas actividades relacionadas con la cooperativa y el club de fútbol, lo que sugiere que la división no se resolverá fácilmente y que las tensiones en la zona podrían continuar aumentando.