El incidente protagonizado por el diputado local del PRI, Héctor Yunes Landa, durante la comparecencia del secretario de Finanzas y Planeación, Miguel Santiago Reyes Hernández, ha generado una gran controversia en la Asamblea Legislativa. Este altercado se intensificó cuando Yunes Landa interpretó como una falta de respeto hacia las mujeres de la oposición un comentario del secretario, lo que lo llevó a confrontarlo de manera agresiva.
Después de este momento, el diputado no se detuvo ahí y continuó su confrontación fuera del auditorio al enfrentarse a un asesor legislativo, a quien acusó de provocarlo al tomarle fotografías. En la discusión, Yunes Landa utilizó un lenguaje violento y amenazante que fue captado por testigos y se difundió en redes sociales, lo que ha contribuido a un ambiente de tensión y descontrol en el recinto legislativo.
La presidenta de la Comisión Permanente de Hacienda del Estado, Tanya Carola Viveros Cházaro, intentó calmar la situación, pero su intervención no fue suficiente para contener al legislador del PRI, quien ya había estado en el centro de otros episodios polémicos en el pasado. Este comportamiento sugiere un patrón de confrontación por parte de Yunes Landa, lo que plantea preocupaciones sobre el respeto y la civilidad en las discusiones políticas en el Congreso. La creciente violencia y agresividad en los espacios legislativos pone en tela de juicio la capacidad de estos representantes para llevar a cabo un diálogo constructivo y respetuoso.