El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, ha revelado que el estado enfrenta adeudos que ascienden a 5 mil millones de pesos, los cuales han sido "heredados" de administraciones anteriores. Este anuncio se dio al inicio de su quinto año de gobierno, a pesar de que parte de la deuda proviene del gobierno del exgobernador Mario López Valdez, que ocupó el cargo hasta 2016, y de Quirino Ordaz Coppel, quien fue gobernador hasta 2021. Rocha Moya mencionó que las finanzas estatales aún arrastran adeudos relacionados con la gestión de Ordaz Coppel, quien actualmente es embajador de México en España.
Ante la situación económica, el gobernador comentó que el año pasado se solicitó un crédito importante de 2 mil 300 millones de pesos, destinado a obras públicas, con el fin de reactivar la economía local. Según los detalles proporcionados, los adeudos incluyen 2 mil 136 millones de pesos debidos al SAT por auditorías irregulares y 2 mil 641 millones de retenciones no entregadas a instituciones como el Instituto de Pensiones del Estado (IPES) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issstesin).
Durante su conferencia semanal, Rocha Moya también informó que se están llevando a cabo investigaciones en la Fiscalía local y en la Fiscalía General de la República desde 2017. Hasta el momento, se han pagado 676 millones de pesos que corresponden al 5% del Fondo de Vivienda de Isssteesin.