El Juez Primero de Distrito con sede en Bacalar, Darío Alejandro Villa Arnaiz, ha levantado la suspensión de la construcción de una casa de descanso de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a orillas de la Laguna de Siete Colores. Esta decisión se basa en el fallo en contra del amparo solicitado por un grupo de niñas y niños de la comunidad, a quienes se les negó el interés legítimo para reclamar un medio ambiente sano y sus derechos socioculturales, argumentando que no hay un daño directo que los afecte.
Esta resolución se enmarca dentro de la reciente reforma a la Ley de Amparo, que se aprobó el 14 de octubre y que limita el acceso a esta figura legal, lo que representa un cambio significativo en la protección de los derechos ambientales. El abogado Daud Rincón, del Instituto Federal de la Defensoría Pública, quien está acompañando el proceso judicial de los menores, comentó que el juez no encontró evidencia de que las obras estuvieran generando un impacto ambiental que justificara el interés legítimo de los niños para continuar con el reclamo.
Hasta el momento, aunque se han levantado algunas suspensiones relacionadas con esta obra militar, todavía permanece vigente una suspensión definitiva promovida por ciudadanos de Bacalar. Asimismo, el amparo interpuesto por la organización Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano (DMAS) también fue desechado por el Primer Tribunal Colegiado de Circuito de Quintana Roo.
La construcción de la casa de descanso comenzó en marzo, con la entrada de maquinaria y materiales en la zona, lo que ha generado preocupación entre los ciudadanos locales acerca de su impacto en el entorno natural de la laguna.