La tormenta del 2 de septiembre en Ciudad de México tuvo un impacto significativo, arrojando 34 millones de metros cúbicos de agua y afectando al menos 602 viviendas en varias alcaldías. La jefa de Gobierno, Clara Brugada, mencionó que esta tormenta rompió un récord de precipitación, siendo la zona de influencia afectada cinco veces mayor que durante las lluvias del 10 de agosto, que había acumulado 24 millones de metros cúbicos.
Brugada también destacó el aumento en la frecuencia de las alertas púrpura, que indican fuertes lluvias superiores a 70 milímetros, pasando de una vez por temporada a aproximadamente cada 15 días. Mario Esparza, titular de la Secretaría de Gestión Integral del Agua, informó que las alcaldías más perjudicadas fueron Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Iztacalco, Iztapalapa y Cuauhtémoc.
Pese a la magnitud de la tormenta, se implementó el Plan Tlaloque, logrando reducir los tiempos de respuesta ante las inundaciones. En el caso anterior, del 10 de agosto, se tardaron un día en controlar la situación, mientras que esta vez se logró en menos de seis horas, a pesar de que el área afectada fue considerablemente mayor. Además, se observó un incremento del 142% en la cantidad de lluvias intensas en comparación con años anteriores, aunque las afectaciones por inundaciones solo aumentaron un 30%.