El Movimiento en Defensa de la Vida y el Territorio (Modevite) ha expresado su fuerte oposición a la construcción de la autopista San Cristóbal de las Casas-Palenque, promovida por el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar. Este grupo, conformado por miembros de comunidades tseltales, tsotsiles y choles de 13 municipios, argumenta que el proyecto se comunica como un avance para la región, pero en realidad no ofrece beneficios a quienes dependen de sus tierras para subsistir.
Modevite denuncia que la propuesta de la autopista se ha manejado con advertencias hacia quienes se opongan a su construcción, evidenciando una falta de diálogo y respeto hacia las comunidades afectadas. La organización también resalta que este proyecto, que ha sido suspendido en administraciones anteriores debido al rechazo de las comunidades indígenas, ahora se presenta como una de las prioridades del actual gobierno.
En un contexto donde el gobierno estatal ha iniciado un proceso de consulta a las comunidades indígenas sobre el proyecto, Modevite aclara que su oposición no se basa en estar en contra del progreso, sino en la defensa de sus derechos y el rechazo a la imposición de proyectos que benefician a unos pocos a costa de su territorio. Además, la propuesta gubernamental de que las ganancias por peajes y otras iniciativas sean dirigidas a los pueblos originarios no es suficiente para mitigar su descontento.
La situación refleja la continua lucha de las comunidades indígenas por preservar su forma de vida y sus derechos frente a proyectos de infraestructura que consideran invasivos y perjudiciales.