El 25 de noviembre, el peso mexicano comenzó la jornada con una apreciación del 0.30%, cotizándose aproximadamente a 18.45 pesos por dólar, según datos de Bloomberg. Durante la sesión nocturna, el tipo de cambio fluctuó entre un máximo de 18.53 y un mínimo de 18.434 pesos por cada dólar. Este fortalecimiento del peso se debe en parte al debilitamiento del dólar estadounidense, impulsado por la expectativa de un posible recorte en la tasa de interés por parte de la Reserva Federal en su próxima reunión del 10 de diciembre, de acuerdo con el análisis del Banco Base.
Esta expectativa se ha visto respaldada por la publicación de datos económicos en EE. UU., incluyendo el informe de empleo de ADP, que indicó que se habían perdido un promedio de 13,500 empleos por semana en las cuatro semanas hasta el 8 de noviembre. Aunque estos datos no son oficiales, se consideran más actualizados que los informes del Buró de Estadísticas Laborales, los cuales influyen en las decisiones de la Reserva Federal.