La presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, expresó su descontento con el gobierno de Estados Unidos por no haber coordinado adecuadamente con la Fiscalía General de la República (FGR) durante la extradición de Ovidio Guzmán López, quien fue detenido en México y luego enviado a Estados Unidos, donde enfrenta acusaciones por tráfico de drogas. Sheinbaum afirmó que al menos debería haberse establecido una comunicación y una colaboración más efectiva entre las autoridades de ambos países.
En su conferencia, la mandataria recordó las repercusiones de las detenciones relacionadas con el crimen organizado en México, sugiriendo que estas han contribuido al aumento de la violencia en estados como Sinaloa, que ahora enfrenta altas tasas de homicidio. Además, planteó preguntas sobre cómo el gobierno estadounidense clasifica a las organizaciones criminales en México, así como su enfoque hacia ellas, invitando a una reflexión sobre las acciones concretas de Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico.
Esta situación pone de relieve las tensiones entre México y Estados Unidos en materia de seguridad y cooperación judicial, especialmente en el contexto de la lucha contra el narcotráfico y el impacto del crimen organizado en la sociedad mexicana.