El cantante R. Kelly, cuyo nombre real es Robert Sylvester Kelly, ha visto denegada su solicitud para ser liberado de prisión por una jueza federal que argumenta que no tiene jurisdicción para considerar las acusaciones que hizo respecto a supuestas conspiraciones en su contra en la prisión. La jueza Martha M. Pacold canceló una serie de argumentos programados y, en su lugar, emitió un fallo en el que rechazó la solicitud de Kelly de cumplir su condena en detención domiciliaria durante un permiso temporal.
Kelly, de 58 años y ganador de varios premios Grammy, se encuentra cumpliendo una condena en una prisión de Butner, Carolina del Norte, por delitos sexuales cometidos contra menores y por extorsión. En su fallo, Pacold destacó las limitaciones jurisdiccionales del tribunal, subrayando que, a pesar de las alegaciones extraordinarias presentadas por Kelly, no había ninguna ley que permitiera que el tribunal ejerciera jurisdicción en su caso.
Las afirmaciones de Kelly incluyen que funcionarios de la prisión habrían solicitado a grupos extremistas que lo asesinaran para evitar la divulgación de información perjudicial. Además, su abogado argumentó que fue trasladado a régimen de aislamiento y que recibió una sobredosis de medicamentos que le provocó complicaciones graves de salud.