Comerciantes y trabajadores de empresas consideradas no esenciales, como joyerías, zapaterías, tiendas de ropa y telas, artesanías, perfumerías, papelerías, bisutería y lentes, entre otras, reiniciaron con entusiasmo sus actividades mercantiles dominicales, este 18 de octubre, luego de casi 7 meses de que se mantuvo la prohibición para abrir sus negocios como una de las medidas tomadas por las autoridades para prevenir los contagios por Covid 19.
Al mismo tiempo recordaron a los capitalinos que las restricciones para visitar el Centro Histórico de la Ciudad de México se mantienen derivado de que la Ciudad de México se encuentra en semáforo naranja.
Por lo que insistieron en solicitar al visitante del Centro Histórico “estar el menor tiempo posible, no acudir en grupos o con familia y planear sus compras para evitar aglomeraciones”.
Dueños y encargados de pequeños comercios y empresas familiares se comprometieron a mantener los protocolos de higiene establecidos: uso de cubre bocas obligatorio para personal y clientes, toma de temperatura, lavado de manos y aplicación de gel antibacterial, cuidado del aforo en los establecimientos.
Los comerciantes externaron su reconocimiento a las autoridades capitalinas por la atención a sus peticiones de quitar los cercos metálicos que restringían la movilidad en las calles Madero, 16 de septiembre, Tacuba y Palma, entre otras.
No obstante algunos promotores de servicios como ópticas, muchos de los cuales no portan el cubrebocas y se distinguen por invitar a gritos al público a pasar a esos negocios, se incorporan a esta actividad portando carteles en los que argumentan su derecho al trabajo al ejercer esa actividad.

Fuente: La Jornada