La Fiscalía del estado de Michoacán ha avanzado en la investigación del asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo. Según la información oficial, uno de los escoltas de Manzo, identificado como Demetrio N., disparó contra el sicario que mató al alcalde, un adolescente de 17 años llamado Víctor Ubaldo. Este hecho ocurrió tras el ataque durante un evento del Día de Muertos.
Las autoridades han detenido a siete policías municipales, incluido Demetrio N., por su implicación en el homicidio. Se revela que Demetrio N. disparó a Ubaldo en la nuca, cuando ya se encontraba esposado, utilizando la misma arma que había sido utilizada para asesinar a Manzo. A pesar de que Demetrio N. inicialmente alegó que disparó durante un forcejeo, la Fiscalía ha contradicho su versión. Además, se ha señalado que los policías impidieron que un paramédico atendiera a Ubaldo, permitiendo el acceso solo cuando llegó la Guardia Nacional, momento en el que el sicario ya había fallecido.
Se ha informado que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) ofreció una recompensa de 2 millones de pesos por el asesinato del alcalde. Esta situación ha llevado a los escoltas a enfrentar cargos por homicidio calificado en la categoría de comisión por omisión. El ataque contra Manzo ocurrió después de un evento en Uruapan, donde recibió múltiples disparos y fue trasladado al hospital, donde posteriormente falleció.