La obra de Banksy en el Zoológico de Londres ha generado un gran interés y discusión entre los visitantes y el público en general. El mural, que retrata a un gorila y otros animales escapando de su hábitat, se ha interpretado de diversas maneras, con algunos sugiriendo que el artista está haciendo una crítica a la existencia de los zoológicos y su tratamiento de los animales.
La respuesta del zoológico ha sido positiva, resaltando la importancia de la obra en la generación de diálogos sobre la vida silvestre y el bienestar animal. Kathryn England, directora de operaciones del zoológico, ha expresado su gratitud hacia Banksy por centrar la atención en estos temas relevantes.
El mural, que atrajo a multitudes en su breve exhibición, se retiró para ser preservado, y su presencia ha dejado un impacto significativo en la comunidad, invitando a reflexionar tanto a jóvenes como a adultos sobre la relación entre humanos y animales en entornos de cautiverio. El uso de la jerga en la reproducción de la obra, "Banksy woz ere", destaca la cultura urbana y el humor característico del artista, consolidando este evento como un punto destacado en la historia del zoológico.
A través de su arte, Banksy continúa desafiando las normas y provocando discusiones sobre temas sociales y ambientales, lo que refuerza su estatus como un importante comentarista cultural en la actualidad. Sin duda, esta obra servirá como un recordatorio de la relación entre los humanos y el mundo natural, así como de la capacidad del arte para inspirar el diálogo y el cambio.