El video proyectado durante la clausura del Festival de Música de Morelia 'Miguel Bernal Jiménez' (FMM) hizo eco de la importancia de la música como un refugio y un medio de expresión frente a la adversidad y la violencia que ha marcado al estado de Michoacán. A lo largo de sus diez días de actividades, el festival ha fungido como un "faro en la oscuridad", destacando el papel de la cultura y el arte en la cohesión social y el fortalecimiento del espíritu comunitario.
El recital final, realizado en el emblemático Teatro Matamoros, fue un reflejo de esta unión. La decoración con flores y adornos de artesanos locales, así como las luces LED ascendiendo al firmamento, simbolizaban la esperanza y la resistencia de la comunidad moreliana frente a los desafíos que enfrenta. El cierre también incluyó un momento significativo en el que se distribuyeron luces entre el público, creando un ambiente de unidad y celebración.
El evento tuvo lugar en un contexto sensible, ya que en días previos la ciudad había sido escenario de protestas relacionadas con la violencia local, particularmente el asesinato del alcalde de Uruapan. Sin embargo, durante la clausura, la atmósfera festiva y de alegría permitió a los habitantes de Morelia disfrutar de su calle histórica, enriquecida por el bullicio de vendedores ambulantes y guías turísticos que compartían leyendas locales.
La muestra musical a cargo de la Orquesta Filarmónica Joven de Colombia, bajo la batuta de Santiago Cañón, añadió un componente de grandeza al evento, mientras que la presencia de funcionarios en la clausura subrayó el compromiso de la comunidad con la cultura. Verónica Bernal Vargas, directora del festival, también se hizo eco de la realidad que enfrenta el estado, reconociendo que, a pesar de las dificultades, el festival se ha consolidado gracias al apoyo de la iniciativa privada y al cariño de la población.
El video de clausura, junto con las palabras de Bernal Vargas, sirvieron como un recordatorio de que la música tiene el poder de unir, inspirar y ofrecer consuelo, incluso en tiempos de incertidumbre.