Las asociaciones civiles Presunción de Inocencia y Derechos Humanos (PIDH) y Frente Mexiquense en Defensa para una Vivienda Digna (FMDVD) han presentado un recurso ante el Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM) en contra de la entrega de la constancia de mayoría a Alejandro Gómez Sánchez, quien fue exfiscal de Justicia del Estado de México y ha sido nombrado magistrado electo del Tribunal de Disciplina Judicial de la entidad (TDJEM).
Las organizaciones argumentan que Gómez Sánchez no cumple con los requisitos constitucionales de buena fama pública, honestidad y honorabilidad. En su impugnación, mencionan una serie de conductas que, según ellos, justifican su denuncia: el encubrimiento y manipulación de la ejecución extrajudicial en Tlatlaya, la falta de investigación y sanción a los mandos responsables de la represión en Atenco, y la incorrecta aplicación del Fondo de Aportaciones para Seguridad Pública (FASP) en relación con el Sistema de Justicia Penal Acusatorio (SJPA).
El documento presentado destaca que, desde su nombramiento como procurador general de Justicia el 26 de mayo de 2014, se registró un aumento en actos de tortura, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales, incluso la de una menor de 14 años. Además, se alega que se fabricaron casos penales en contra de miles de jóvenes y que muchas personas inocentes fueron encarceladas y condenadas sin haber cometido un delito.
También se menciona la experiencia personal de José Humbertus Pérez Espinoza, quien fue detenido y encarcelado bajo cuatro acusaciones falsas que nunca se comprobaron, lo que llevó a ser considerado un prisionero de conciencia y a ser liberado bajo el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Dentro de las acusaciones, se menciona directamente la participación de Gómez Sánchez en la manipulación de la ejecución extrajudicial de Tlatlaya, donde se reporta que 22 civiles perdieron la vida. Clara Gómez González, madre de una de las víctimas, ha testificado sobre los eventos, afirmando que los militares actuaron de manera indiscriminada mientras los civiles dormían.