El contexto que describe el artículo refleja una situación preocupante en México en 2025, donde un alto porcentaje de la población no cuenta con los ingresos necesarios para cubrir sus necesidades básicas. Los datos indican que el 64.3% de los hogares mexicanos enfrenta dificultades para acceder a una alimentación adecuada y a otras necesidades esenciales. Esta situación se agrava en estados como Chiapas, Oaxaca y Guerrero, donde los porcentajes de población sin ingresos suficientes son alarmantemente altos.
El desmantelamiento del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) por parte del gobierno de Claudia Sheinbaum, así como la continuación del Paquete contra la Inflación y la Carestía (Pacic) heredado, indican un enfoque en políticas que parecen no abordar de manera efectiva la crisis económica y social que afecta a millones. La combinación de inflación y bajos ingresos ha llevado a muchas personas a tener que elegir entre cubrir sus necesidades alimentarias y acceder a servicios de salud, lo que pone en riesgo su bienestar general.
Este informe pone de relieve la grave crisis del empleo y la desigualdad en el país, y sugiere que se requieren medidas más efectivas y una evaluación constante de las políticas públicas para abordar estas problemáticas de manera integral.