La situación descrita revela un contexto de creciente tensión entre México y Estados Unidos, especialmente en el ámbito de las relaciones comerciales, donde la implementación de nuevos aranceles a partir del 1 de agosto ha generado inquietud. Larry Rubin, presidente de la American Society, ha expresado la necesidad de que México mantenga distancia de los BRICS, que incluye a Rusia y China, debido al antagonismo que estos países mantienen con Estados Unidos, el principal socio comercial de México.
Rubin enfatiza que cualquier acercamiento diplomático de México hacia naciones en el bloque BRICS podría ser mal visto desde Washington, y aunque reconoce que hasta ahora México no ha formalizado un papel activo dentro de este grupo, considera prioritario que el país mantenga su alineación económica y comercial con Estados Unidos. Al mismo tiempo, Rubin valora los esfuerzos del gobierno mexicano por fortalecer la relación con las autoridades y la sociedad civil estadounidense, sugiriendo que esta alianza sigue siendo fundamental para el futuro económico de México.