El nuevo Plan Estratégico 2025-2035 de Petróleos Mexicanos (Pemex), presentado por el gobierno de Claudia Sheinbaum, se centra en el pago a proveedores por proyectos nuevos, dejando de lado los adeudos anteriores. Según el documento consultado, aunque se han realizado algunos pagos de deudas vencidas en 2025, los pasivos pendientes comprometen la viabilidad financiera de la empresa.
El plan reconoce que estos pagos representan un desafío para los recursos presupuestarios que deben destinarse a operaciones cruciales y otras necesidades productivas. No obstante, no se proporciona un calendario, montos o un proceso específico para liquidar las deudas acumuladas antes de 2025. Se menciona que la ejecución de pagos se llevará a cabo conforme a la disponibilidad de recursos y bajo criterios de transparencia, pero esto no ofrece claridad sobre cómo se manejarán las deudas anteriores.
Pemex ha admitido que su deuda comercial con proveedores y contratistas ha crecido en los últimos años. Aunque se ha creado un fondo de inversión con la participación de Banobras, este tiene un alcance limitado y solo podrá utilizarse para cubrir servicios y proyectos de 2025, lo que implica que los adeudos previos seguirán sin resolver, complicando la situación financiera de la empresa y su relación con los proveedores.