El peso mexicano comenzó la sesión del 11 de julio con una depreciación del 0.48%, cotizando a 18.70 unidades por dólar, según datos de Bloomberg. Esta tendencia se debe a la presión ejercida por la reciente imposición de aranceles del 35% por parte de Estados Unidos hacia Canadá, lo que ha aumentado la percepción de riesgo en torno a la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Analistas del Grupo Monex han señalado que el nerviosismo de los inversionistas ha crecido ante la posibilidad de que México sea objeto de tarifas no previstas anteriormente. Además, se ha agregado el endurecimiento de las restricciones para las importaciones de cobre, ya que los aranceles del 50% que afectan a este metal ahora incluirán productos semiacabados, lo que se espera que impacte a varios sectores económicos.
Ambas medidas de aranceles, tanto hacia Canadá como las nuevas restricciones sobre el cobre, están programadas para entrar en vigor el 1 de agosto. Según Monex, esta situación continúa alimentando la aversión al riesgo en los mercados, especialmente tomando en cuenta las estrategias previas del presidente Trump en cuestiones comerciales.