El reportaje de la revista **Proceso** en su edición de agosto, titulado “Los pecados de Adán”, investiga los lazos entre el aparato de seguridad y justicia de Tabasco y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Este tema había sido previamente señalado por los servicios de inteligencia del Estado mexicano durante el mandato de Andrés Manuel López Obrador. Se destacan casos relevantes, como el de Hernán Bermúdez, secretario de Seguridad en la administración de López, y Nicolás Bautista Ovando, vicefiscal que después asumió la Fiscalía de Tabasco a propuesta de Adán Augusto López Hernández.
En Veracruz, la investigación resalta cómo la conexión entre el poder político y el crimen organizado se ha normalizado, especialmente en el contexto de la extracción ilegal de combustibles. Las fuerzas federales han intervenido en actividades ilícitas, como el desmantelamiento de plantas huachicoleras que operaban abiertamente, a pesar de que el gobierno estatal, encabezado por la gobernadora Rocío Nahle, minimizó la situación sosteniendo que una de las instalaciones no era ilegal, sino una simple “mezcladora de aceites”.
Además, el reportaje informa sobre la controversia relacionada con el otorgamiento de un crédito fiscal de 50 millones de pesos a Laboratorios Collins, de Jalisco, en contraste con su vinculación previa en 2008 a actividades de lavado de dinero. La empresa está actualmente bajo investigación por manejo indebido de sustancias controladas. La publicación ya está disponible en formato físico y electrónico.