Arrojan ácido a rostro de una mujer emprendedora en Tijuana

La situación que enfrenta Fernanda Sánchez es alarmante y refleja una creciente preocupación por la seguridad de los emprendedores, especialmente las mujeres, en México. El ataque con una sustancia corrosiva no solo es un acto violento, sino también un claro ejemplo de la impunidad que puede existir en situaciones de agresión.
Fernanda, al compartir su experiencia, busca visibilizar la violencia que muchas personas enfrentan en su vida cotidiana y, al mismo tiempo, espera que su testimonio sirva para generar consciencia y movilizar apoyo. Es fundamental que las autoridades tomen en serio este tipo de ataques y protejan a las víctimas, así como investiguen y sancionen a los responsables. La denuncia pública puede ser un primer paso hacia la justicia y la prevención de futuros incidentes similares.
Es necesario también fomentar espacios seguros para los emprendedores y brindarles las herramientas adecuadas para enfrentar situaciones de riesgo. La comunidad en Tijuana y más allá debe unirse para rechazar la violencia y apoyar a aquellos que están en situaciones vulnerables.

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