La situación de Italia en el fútbol ha tomado un giro inesperado tras la derrota ante Noruega. El técnico Luciano Spalletti ha anunciado su despido después de que la Federación Italiana de Fútbol decidiera que no continuaría al frente del equipo tras el mal inicio en las eliminatorias para la Copa Mundial. A pesar de que Spalletti había expresado su deseo de continuar, la presión por el rendimiento del equipo parece haber influido directamente en esta decisión.
Se menciona que Claudio Ranieri, quien recientemente tuvo éxito con la Roma, es una de las opciones principales para suceder a Spalletti, aunque aún no se ha realizado un nombramiento oficial. La selección italiana tendrá un tiempo de inactividad tras su partido contra Moldavia, ya que no volverá a jugar hasta septiembre, lo que podría dar a la federación tiempo para tomar una decisión informada sobre el nuevo entrenador.
Spalletti se hizo cargo del equipo en agosto de 2023, reemplazando a Roberto Mancini, y contaba con un contrato de tres años hasta el Mundial de 2026. Su salida refleja las expectativas y la presión que enfrenta un director técnico al mando de una selección con una rica historia en el fútbol mundial.