En la Super Final de la Copa del Mundo de Clavados que se lleva a cabo en Beijing, China, los medallistas olímpicos de plata Osmar Olvera y Juan Manuel Celaya enfrentaron una situación desafortunada al finalizar en el último lugar en la prueba de saltos sincronizados desde el trampolín de 3 metros. Durante la ronda final, ambas figuras mexicanas recibieron calificaciones de cero debido a una confusión respecto a los saltos que debían ejecutar.
La situación se originó porque, al ejecutar su salto de cierre, se realizó un salto diferente al que estaba registrado oficialmente. Esto se debió a un error en la comunicación entre los clavadistas y la lista oficial, donde el salto que intentaron hacer (dos y media vueltas al frente con tres giros, correspondiente a una dificultad de 3.9) no coincidía con el saltado que aparecía en la lista (dos y media vueltas al frente con un giro, de dificultad 3.0), el cual ni siquiera habían competido anteriormente. Este error llevó a que los jueces invalidaran su ejecución automáticamente.
A pesar de que Olvera y Celaya habían alcanzado la tercera posición con un total de 332.40 puntos en las rondas previas y estaban en una clara posición para competir por medallas, el error les hizo caer al octavo lugar final. La prueba fue ganada por los chinos Yukang Hu y Jiuyuan Zheng con 448.65 puntos, seguidos por los británicos Anthony Harding y Jack Laugher, y los alemanes Lou Massenberg y Moritz Wesemann.
Esta confusión es un recordatorio de la importancia de la comunicación y la precisión en competencias de alto nivel, y, a pesar del contratiempo, los clavadistas mexicanos han demostrado un rendimiento sólido previamente, incluyendo su subcampeonato olímpico y varias medallas en Copas del Mundo recientes.