El partido amistoso entre México y Portugal, programado para el 28 de marzo de 2026, ha generado una gran expectación, especialmente tras la reinauguración del emblemático Estadio Azteca. La preventa de boletos, gestionada por la empresa Fanki, fue programada después de un colapso previo en su plataforma, lo que provocó una serie de quejas y problemas técnicos.
Fanki, una empresa colombiana, enfrentó problemas serios durante el proceso de preventa inicial en diciembre, debido a un "volumen de tráfico anómalo" y la aparición de páginas fraudulentas que intentaron suplantar su identidad. Aunque se intentó reanudar la venta de boletos, los problemas persistieron y muchos aficionados denunciaron su incapacidad para adquirir entradas a pesar de intentarlo durante horas.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) intervino, exigiendo a Fanki que proporcionara información clara y precisa a los consumidores. Los usuarios, que eran principalmente tarjetahabientes de Banorte, expresaron su frustración por la situación y cuestionaron la capacidad de una boletera relativamente desconocida para manejar la alta demanda que un evento deportivo de este calibre requiere.
A medida que avanza la planificación para el partido, queda esperar si se tomarán medidas adecuadas para mejorar el sistema de venta y asegurar que los aficionados puedan acceder a los boletos de manera justa y eficiente. Este evento, especialmente con la posible participación del famoso jugador Cristiano Ronaldo, promete ser uno de los más destacados en el calendario futbolístico de 2026.