La situación en el Poder Judicial de la Ciudad de México (PJCDMX) ha enfrentado un grave obstáculo debido a un paro iniciado el 28 de mayo por parte de los trabajadores de la institución. Este paro ha afectado a cerca de 100 mil usuarios que dependen de los servicios judiciales en diversas áreas, incluyendo asuntos civiles, familiares, penales y laborales. Los trabajadores exigen mejoras significativas, que incluyen:
1. **Incremento salarial**: Piden un aumento en sus sueldos para reflejar mejor sus responsabilidades y la carga de trabajo. 2. **Actualización de equipos y mobiliario**: Solicitan la renovación de los equipos de cómputo y mejoras en las instalaciones para facilitar su trabajo. 3. **Contratación de más personal**: Plantean la necesidad de incorporar más trabajadores para poder manejar la creciente carga de tareas judiciales. 4. **Cese del hostigamiento laboral**: Denuncian prácticas de intimidación por parte de jueces y magistrados hacia los empleados.
El paro ha llevado a la suspensión de plazos y términos judiciales en miles de juicios, limitando las operaciones del PJCDMX a solo los trámites considerados urgentes, como los relacionados con pensiones alimenticias y casos de violencia familiar. Otros trámites importantes, como solicitudes de divorcio y juicios civiles, han quedado estancados.
El contexto de esta crisis se complica por un rezago judicial que se ha arrastrado desde 2020, exacerbado por la pandemia de COVID-19, la cual obligó al PJCDMX a cerrar sus instalaciones y acelerar su digitalización. Sin embargo, la administración actual ha mantenido recortes presupuestales, y el reciente inicio de la implementación del Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares ha añadido presión al sistema judicial, ya que implicó la redistribución de expedientes sin el incremento de recursos humanos ni económicos suficientes.
La situación sigue sin resolverse, y se espera que continúen las afectaciones para usuarios y trabajadores del PJCDMX mientras se busca una solución al conflicto.