El alcalde de Ures, Gastón Rodríguez, propuso resolver diferencias a través de una pelea a golpes con Rafael Bracamontes, un integrante del movimiento opositor a la construcción de un sistema de presas en Sonora. Esta propuesta fue hecha en redes sociales la noche del 23 de octubre y se acompañó de críticas hacia Bracamontes, a quien acusó de ofender a su familia en sus comentarios. Aunque el mensaje fue posteriormente eliminado, Rodríguez aludió en los comentarios a la libertad de expresión, pero con un tono que suavizaba su planteamiento inicial.
Bracamontes respondió a la propuesta en un comunicado a nombre del Movimiento No a las Presas en el Río Sonora, condenando las actitudes violentas del alcalde y responsabilizándolo de cualquier daño que pudiera sufrir él o su grupo por dichas declaraciones. Además, subrayó que la situación es grave dado que el alcalde tiene acceso a recursos de Seguridad Pública Municipal.
Este episodio no es aislado, ya que Rodríguez ha estado en el centro de la controversia en el debate sobre un plan hídrico en Sonora, habiendo sido criticado previamente por su relación con Grupo México y sus declaraciones respecto a la colaboración de la empresa en la controvertida obra, lo que provoca desconfianza debido a la historia de contaminación que esta compañía ha dejado en la región.