El cáncer de próstata es una de las principales preocupaciones de salud pública en México, siendo la primera causa de muerte entre hombres adultos, según datos recientes del Instituto Nacional de Cancerología (InCan). Cada año se detectan más de 25,000 nuevos casos, y lamentablemente, más de 7,500 muertes se atribuyen a esta enfermedad.
Una de las razones por las cuales la tasa de mortalidad es tan alta es que muchos pacientes buscan atención médica en etapas avanzadas de la enfermedad, donde las posibilidades de curación son mínimas. Para abordar esta situación, las autoridades de salud, como el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, han recomendado a los hombres que comiencen a realizarse chequeos preventivos a partir de los 40 años. Esto incluye la evaluación de síntomas urinarios, y en algunos casos, exámenes como el tacto rectal y pruebas de antígeno prostático específico.
El IMSS también ofrece recursos como la aplicación "CHKT" para realizar una evaluación de riesgo en línea. En caso de ser necesario, se pueden realizar biopsias y estudios adicionales para un diagnóstico más preciso. Aunque el cáncer de próstata no puede prevenirse, el diagnóstico temprano juega un papel crucial en el éxito del tratamiento.
Es importante que los hombres se mantengan informados y participen activamente en su cuidado de salud, comprendiendo la naturaleza del cáncer de próstata, sus riesgos y la importancia de las revisiones regulares para mejorar las probabilidades de detección temprana y tratamiento efectivo.