El reciente incendio en una sucursal de Waldo's en Hermosillo, Sonora, ha resultado en la trágica pérdida de 23 vidas y ha llevado al gobierno del estado a cerrar todas las sucursales de la franquicia en la región mientras se realizan las investigaciones pertinentes. Según las autoridades, la sucursal involucrada no contaba con un programa interno de protección civil debidamente aprobado.
El secretario de gobierno, Adolfo Salazar Razo, informó que, tras comunicarse con el propietario de la cadena, se tomó la decisión de cerrar temporalmente los 68 establecimientos repartidos por varios municipios de Sonora hasta nuevo aviso. Se mencionó que el programa de protección civil había sido aprobado en la administración anterior, pero no entendieron por qué continuó operando a pesar de la evaluación negativa que recibió en 2021.
En cuanto al incendio, que fue precedido por una explosión, se ha informado que un transformador, parte de una subestación eléctrica privada del comercio, fue el origen del fuego y que se encontraba en una zona donde podría haberse acumulado riesgo. También se ha señalado que la subestación estaba conectada a paneles solares en el techo del local.
De los sobrevivientes, cinco personas siguen hospitalizadas, incluidas dos de gravedad. Las autoridades se están encargando de los gastos funerarios de las víctimas y han comenzado el proceso de identificación y entrega de cuerpos a sus familias.
La situación ha suscitado preguntas sobre las salidas de emergencia del establecimiento, ya que se reporta que solo contaba con una entrada principal, lo que dificulta la evacuación en situaciones críticas. Las autoridades aún no han aclarado este aspecto. El caso sigue generando duda y preocupación en la comunidad, que busca respuestas y justicia en medio de esta tragedia.