La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha manifestado su preocupación sobre el posible impacto del cierre del Estrecho de Ormuz en el precio de las gasolinas en el país, en el contexto de tensiones en Medio Oriente. Este estrecho es crucial para el comercio global del petróleo, ya que por él transita aproximadamente el 20% del consumo mundial de petróleo. Sheinbaum explicó que, si los precios internacionales de la gasolina se disparan, México tiene un mecanismo, mediante el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que podría ayudar a evitar un aumento en los precios de las gasolinas a nivel nacional.
A pesar de las tensiones actuales, la presidenta destacó que, hasta el momento, el incremento en el precio del petróleo ha sido mínimo. También subrayó que México tiene una ventaja significativa en la producción de petróleo, ya que casi todo el crudo que produce se refina en territorio nacional, lo que podría mitigar el efecto de las fluctuaciones en los precios internacionales. Además, hizo mención a la operación de la refinería de Dos Bocas, resaltando un informe positivo de la Agencia Internacional de Energía sobre esta instalación.