La inauguración de la Línea 11 del Trolebús en la Ciudad de México ha sido un tema de interés para muchos usuarios del transporte público. Este nuevo servicio, que conecta Chalco con Santa Martha, permitirá a más de tres millones de personas del oriente del Estado de México acceder a la capital, lo cual es un avance en términos de movilidad urbana. Sin embargo, el ajuste en las tarifas ha generado descontento entre los pasajeros.
Los usuarios han expresado su frustración debido a que la tarifa varía según el punto de origen y destino, especialmente para quienes abordan el Trolebús desde el Estado de México. Mientras que el trayecto de Constitución de 1917 a Santa Marta sigue costando siete pesos, el costo se incrementa para los pasajeros que inician su viaje en Chalco. Esta situación ha llevado a comparaciones con el Tren Suburbano, donde los usuarios sienten que el costo de un servicio considerado "público" es excesivo en comparación con otras alternativas de transporte.
Las quejas en redes sociales resaltan la percepción de que el Trolebús es un medio de transporte lento y congestionado, lo que aumenta la insatisfacción de los pasajeros, quienes ven el ajuste de tarifas como un cobro injusto dentro del marco del Sistema de Movilidad Integrada.