La intensa lluvia que azotó la Ciudad de México la noche del 10 de septiembre generó una serie de incidentes significativos, incluyendo al menos 80 encharcamientos, la caída de nueve árboles y un poste, así como un cortocircuito. Las afectaciones se registraron principalmente en las alcaldías de Tlalpan, Coyoacán, Álvaro Obregón y Cuauhtémoc, impactando a varias viviendas en esas zonas.
Ante esta situación, el Gobierno de la Ciudad de México activó el operativo Tlaloque, movilizando a personal de la Secretaría de Gestión Integral del Agua (Segiagua) que incluyó a 156 elementos como ingenieros y técnicos, además de cuadrillas de drenaje. También se destinaron 50 vehículos, que incluyeron bombas, hidroneumáticos y grúas, para abordar las emergencias.
A pesar de las lluvias intensas, que acumuladas alcanzaron más de 19.8 millones de metros cúbicos en toda la capital, los niveles de las presas, cauces y canales se mantuvieron estables, lo cual fue un aspecto positivo en medio de la adversidad climática. Los reportes de las autoridades de emergencia como el Heroico Cuerpo de Bomberos y la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRyPC) indican que las colonias más afectadas se encuentran en las fronteras de Tlalpan y Coyoacán, así como en Álvaro Obregón, donde el agua logró ingresar a algunas propiedades.