El gobierno guatemalteco, bajo la administración de Bernardo Arévalo, ha decidido retirar la designación de Raúl Rocha Cantú como cónsul honorario en Toluca desde octubre pasado, antes de que se hicieran públicas las acusaciones en su contra por parte de la Fiscalía General de la República (FGR) de México. Estas acusaciones lo implican en una red criminal relacionada con el contrabando de combustible y armas, así como en conexiones con grupos criminales en México, incluido el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala (MINEX) explicó que la decisión de retirar a Rocha fue la consecuencia de un informe de la embajada de Guatemala en México que señalaba un cambio no autorizado en la dirección del consulado honorario, que Rocha solo estaba autorizado a ejercer en Toluca.
El caso de Rocha ha suscitado una serie de escándalos, comenzando con sus supuestas presiones para otorgar el certamen de Miss Universo a la mexicana Valeria Bosch, quien es hija de un asesor en Pemex. Por otro lado, los reportes periodísticos han mostrado que, a pesar de las investigaciones en su contra, Rocha no fue encarcelado gracias a su decisión de convertirse en testigo colaborador de la FGR.
El MINEX aclaró que la designación de Rocha fue hecha por el gobierno anterior, encabezado por Alejandro Giammattei, y remarcó que los cónsules honorarios no poseen inmunidad diplomática. Este caso resalta el uso potencialmente indebido de la figura de cónsules honorarios, un asunto que también han abordado investigaciones internacionales sobre la influencia de personajes oscuros en estas posiciones.