El reciente informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) que reporta una reducción del 6.8% en la pobreza multidimensional en México ha generado reacciones encontradas. Federico Döring, vocero del PAN en la Cámara de Diputados, criticó el anuncio, describiéndolo como una "cortina de humo" que busca desviar la atención de la crisis interna de Morena y los lujos de algunos de sus políticos. Döring argumentó que este informe intenta ocultar escándalos relacionados con la riqueza de los cercanos a la administración actual y la desigualdad económica persistente en el país.
Por otro lado, Raúl Torres Guerrero, un diputado local de la Comisión de Desarrollo Económico, enfatizó la necesidad de involucrar al sector empresarial en la lucha contra la pobreza. Argumentó que muchas familias aún viven con el salario mínimo y que muchos jóvenes carecen de oportunidades, lo que los deja vulnerables al crimen organizado. Torres hizo un llamado a establecer una cruzada nacional para promover la igualdad y las oportunidades en México, insistiendo en la importancia de una estrategia de bienestar que incluya a los empresarios y no se limite a una política social que apoye solo a un partido político.