La manifestación del 20 de julio en la estación Fuentes Brotantes del Metrobús reunió a alrededor de 600 personas en contra de la gentrificación en la Ciudad de México, un fenómeno que se prevé se intensifique con la llegada de la Copa Mundial de la FIFA 2026. Los asistentes, provenientes de diversas alcaldías, exigieron a la jefa de Gobierno, Clara Brugada, que se implementen medidas más efectivas para enfrentar este problema, considerando que la propuesta actual de la administración es insuficiente.
Aunque la gentrificación se ha reconocido principalmente en las alcaldías de Benito Juárez, Miguel Hidalgo y Cuauhtémoc, los manifestantes de Tlalpan y Álvaro Obregón destacaron que el avance de este fenómeno afecta a más áreas de la ciudad. En particular, se opusieron a la construcción de un complejo residencial en el parque Fuentes Brotantes, considerado vital para la recarga del subsuelo. Denunciaron que dicho proyecto podría ocasionar daños ecológicos y un aumento en el costo de la vivienda para quienes ya residen en esa zona.
María Teresa Gutiérrez, una de las participantes y habitante de Tlalpan, enfatizó la necesidad de que el Gobierno escuche y actúe en favor de los derechos de los ciudadanos, y expresó su preocupación por la escasez de agua en la región a pesar de que se continúan otorgando permisos de construcción de manera indiscriminada. La manifestación fue una clara demanda de atención y acción por parte de las autoridades ante las crecientes problemáticas que enfrentan diversas comunidades en la capital.