Ante la decisión de Donald Trump de posponer hasta octubre la implementación de un aumento arancelario del 30% a productos mexicanos, México ha decidido intensificar los operativos en aduanas y en centros de comercio informal para combatir la piratería de productos asiáticos. Esta estrategia surge como parte de las negociaciones en torno al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y responde a preocupaciones sobre el cumplimiento de las reglas de origen y la protección de la propiedad industrial.
Marcelo Ebrard, secretario de Economía de México, indicó que la protección a la propiedad industrial es un tema central en las discusiones bilaterales, especialmente tras las advertencias de Trump sobre el incumplimiento de México con ciertas obligaciones respecto a las reglas de origen. Ebrard mencionó que el gobierno mexicano tiene un plazo de 90 días para demostrar que está haciendo los ajustes necesarios y mostrando cambios efectivos en el cumplimiento de dichos compromisos.
Santiago Nieto, director del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), añadió que los operativos de vigilancia se realizarán cada quince días hasta fin de año, en diversas regiones del país donde se ha identificado la circulación de productos falsificados. Estos operativos buscan asegurar el cumplimiento de las obligaciones adquiridas en el marco del tratado de libre comercio.