En un desarrollo inusual, un juez federal en Quintana Roo dictó la demolición de un edificio construido sin las debidas autorizaciones en materia de impacto ambiental, ubicado en la costa de Tulum. Este edificio, conocido como Maiim, se había levantado en un área crítica para la anidación de tortugas marinas, con la intención de vender lujosos departamentos a precios elevados.
La resolución judicial fue producto de un juicio de amparo promovido por la asociación civil Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano (DMAS), que había demandado a las autoridades federales y locales por permitir la construcción de este inmueble sin los permisos correspondientes. El edificio se sitúa en bahía Solimán, a aproximadamente 10 kilómetros del centro de Tulum, cerca del Santuario de la Tortuga Marina Xcacel-Xcacelito, que es un área natural protegida.
En Quintana Roo, es común que desarrolladores inicien proyectos inmobiliarios antes de obtener todos los permisos de impacto ambiental necesarios, especialmente dada la atracción turística de destinos como Cancún y la Riviera Maya. El edificio Maiim había recibido licencias municipales del gobierno de Tulum y permisos estatales, los cuales fueron catalogados como irregulares por la asociación DMAS.
La organización, que en el pasado también había obtenido suspensiones relacionadas con el Tren Maya, inició el litigio en agosto de 2022, argumentando que la construcciónponía en peligro a las tortugas marinas, que migran a la región para desovar en esta época del año. A pesar de la legalidad en proceso, los agentes inmobiliarios continuaron promocionando el desarrollo como un proyecto exclusivo frente al mar.
Luego de casi un año de procedimiento judicial y la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), la cual clausuró el proyecto sin que el desarrollador cumpliera con esta medida, el juez emitió una sentencia que prohíbe a las autoridades federales y locales emitir cualquier permiso adicional a la empresa constructora del Maiim.