La situación descrita en Chilpancingo refleja una grave problemática de inseguridad y violencia que afecta a las comunidades rurales de Taxco de Alarcón, Guerrero. Los campesinos han denunciado la presencia y actividades de una organización criminal que ha tomado control de sus territorios desde 2021, marcando un aumento en delitos como secuestros, homicidios y desapariciones.
Estos grupos delictivos han impuesto un sistema de extorsión sobre los pequeños comerciantes de la zona, obligándolos a adquirir productos que contrabandean, lo que afecta negativamente la economía local y la vida cotidiana de los pobladores. Además, los residentes han expresado su preocupación por la falta de apoyo del gobierno en términos de seguridad, educación y servicios sociales, solicitando una serie de medidas, como la búsqueda de personas desaparecidas, la visita de programas sociales a sus comunidades, la creación de una universidad y la instalación de un destacamento de la Guardia Nacional para mejorar la seguridad en la región.
La carta enviada a las autoridades, incluyendo a la presidenta Claudia Sheinbaum y la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, pone de manifiesto la urgencia de atención y respuesta ante un contexto de violencia e impunidad que ha generado el temor y la desprotección de las comunidades afectadas. Estas circunstancias resaltan la complejidad del fenómeno del crimen organizado en México y la necesidad de acciones coordinadas para restaurar la seguridad y la paz en estas áreas.