La reciente manifestación de estudiantes de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) en Mexicali se originó tras un incidente violento que involucró a un compañero de la institución. En este contexto, un alumno de primer semestre identificado como Gustavo, de 18 años, fue agredido el 24 de septiembre, sufriendo fracturas en el cráneo y mandíbula. Este ataque, que se registró frente a la facultad, ha renovado las preocupaciones sobre la seguridad en el campus.
La protesta, que tuvo lugar el 29 de septiembre, incluyó el cierre de vialidades y la exhibición de consignas en cartulinas que expresaban la exigencia de mayor seguridad para la comunidad estudiantil. Los alumnos se manifestaron bajo la premisa de que la presencia de guardias de seguridad no fue suficiente para prevenir el asalto, lamentando la falta de intervención durante el ataque y la respuesta de la dirección de la universidad, que fue criticada por ofrecer información confusa sobre la condición del estudiante.
Además de exigir que se garantice la seguridad en la facultad, los manifestantes hicieron eco de su preocupación general por la violencia y los riesgos que enfrentan los estudiantes, dejando claro que no quieren vivir con miedo al asistir a clases. Asimismo, se ofreció una recompensa para obtener información sobre los agresores, reflejando una creciente inquietud en la comunidad universitaria sobre la protección de sus derechos y bienestar.