La situación en Michoacán se torna preocupante tras el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y la posterior muerte de Víctor Manuel Ubaldo Vidales, señalado como su presunto asesino. El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla ha señalado que hay una investigación en curso para esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte de Ubaldo Vidales, quien fue abatido tras su detención.
Se ha mencionado un "forcejeo" que resultó en un disparo, lo que ha generado dudas sobre el manejo de la situación por parte de las autoridades implicadas. Ramírez Bedolla indicó que la Fiscalía General de Justicia del Estado está investigando todas las líneas posibles, incluyendo la posible vulneración de la seguridad del alcalde Manzo. Es un contexto complicado, dada la gravedad de los hechos y la necesidad de claridad en las acciones de la policía y la fiscalía.
Esta serie de eventos refleja la situación de violencia que se vive en algunas regiones de México, y las investigaciones podrían arrojar luz sobre el ambiente de inseguridad que afecta a los funcionarios y a la sociedad en general.