El Senado de la República de México ha ratificado a cinco magistrados para la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa, quienes ocuparán sus cargos durante un periodo de 15 años a partir del 1 de noviembre de 2025. Los magistrados ratificados son Ariadna Camacho Contreras, Selene Cruz Alcalá, Ludmila Valentina Albarrán Acuña, Eduardo Santillán Pérez y José Ramón Amieva Gálvez. La votación se llevó a cabo con un apoyo mayoritario de 82 votos a favor, 34 en contra y una abstención.
Durante la discusión, el presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, Miguel Ángel Yunes Márquez, defendió la elección, asegurando que los magistrados cumplen con los criterios de idoneidad y representan un compromiso del Ejecutivo Federal por contar con los mejores perfiles para la administración pública.
Sin embargo, la senadora del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Claudia Edith Anaya Mota, presentó una moción suspensiva, argumentando que los magistrados tienen vínculos con el grupo político oficialista y que no cumplen con los criterios de “buena reputación” establecidos en la Ley Orgánica del Tribunal. La senadora hizo hincapié en la falta de honorabilidad, competencia y excelencia profesional, citando preocupaciones sobre las reputaciones de algunos de los magistrados, incluyendo acusaciones vinculadas a actividades delictivas.
La presidenta del Senado, Laura Itzel Castillo Juárez, tomó la protesta a los nuevos magistrados, a pesar de las objeciones planteadas. Este evento subraya la polarización política en México y las tensiones en torno a las designaciones en instituciones clave.