Claudia Sheinbaum, la presidenta de México, ha manifestado su intención de formar un frente de varios países para buscar una solución pacífica a la crisis entre Estados Unidos y Venezuela. En su anuncio, destacó su preocupación por el aumento de tensiones y reafirmó la postura de México en contra de cualquier intervención en los asuntos internos de otros países.
Sheinbaum mencionó que, hasta el momento, no ha recibido solicitudes formales de otros gobiernos para unirse a esta iniciativa. Sus declaraciones surgieron en un contexto de creciente conflicto, tras el anuncio del presidente Donald Trump sobre el bloqueo de buques petroleros sancionados que operan en Venezuela, así como el incremento de la presencia militar estadounidense en la región.
La presidenta enfatizó que el conflicto debería resolverse a través de los mecanismos de la ONU y que es fundamental que todas las partes involucradas participen en el proceso. Además, expresó su confianza en que la postura de México en este tema no afectará su relación con Estados Unidos, subrayando que la cooperación entre ambos países continúa siendo esencial y está enmarcada dentro de la Constitución mexicana, que rechaza la intervención extranjera.