El fin de semana, el municipio de Mexicali registró siete homicidios en 24 horas, que podrían estar relacionados con la captura de Javier Gabriel Mora Pino, alias “El Piruja”, un líder del Cártel de Sinaloa (CDS). La detención de Mora, ocurrida el 19 de diciembre, junto con otro individuo y varias armas y drogas, parece haber desencadenado un aumento en la violencia criminal en la zona.
El general Laureano Carrillo Rodríguez, de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Baja California, mencionó que estos homicidios podrían ser una consecuencia del debilitamiento de la estructura delictiva tras la captura de Mora. Según él, mientras algunos grupos criminales pueden verse desestabilizados tras perder a un líder, otros podrían aprovechar la situación para fomentar la violencia en el territorio.
Los homicidios ocurridos los días 27 y 28 de diciembre incluyeron varias víctimas, entre ellas una pareja y tres hombres, además del hallazgo de dos cuerpos embolsados. La situación refleja la compleja dinámica de las luchas entre grupos criminales en la región, especialmente en el contexto de la aplicación de justicia y las violentas repercusiones que estas detenciones pueden generar.