La consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei Zavala, ha afirmado que la elección judicial del pasado 1º de junio se recordará por la forma en que el Consejo General del INE abordó las diversas irregularidades observadas durante el proceso. A pesar de las críticas de cinco consejeros disidentes sobre la incidencia de "acordeones" en los resultados, Taddei destacó que solo se detectaron irregularidades en el 0.89% de las casillas, lo que corresponde a 818 casillas anuladas debido a anomalías como tasas de participación superiores al 100%.
Durante una conferencia de prensa, Taddei defendió la validez de los resultados de las casillas que no fueron anuladas, enfatizando que los seis consejeros que votaron a favor de la legalidad de la elección están convencidos de que el resto de las casillas son limpias. Sin embargo, no mencionó el tema de los "acordeones", que han sido un punto de controversia, ya que estos documentos, distribuidos antes de las elecciones y atribuidos a Morena, coincidieron con los resultados electorales y han suscitado dudas sobre la legitimidad del proceso.
Tanto los consejeros disidentes como una misión de observación electoral de la OEA han expresado inquietudes sobre la validez de los resultados en vista de estas coincidencias y propusieron que el INE no validara los resultados hasta finalizar las investigaciones relacionadas con los "acordeones". No obstante, Taddei y su grupo de consejeros decidieron desestimar esta propuesta, argumentando que las irregularidades solo fueron confirmadas en las 818 casillas anuladas, lo que no representaría suficiente porcentaje como para que el tribunal anulara el proceso. El consejero Uuc-kib Espadas también subrayó que las casillas donde se evidenció adulteración no son contabilizadas y que, con base en las casillas anuladas, no se acerca al porcentaje que podría llevar a la anulación de la elección por parte del tribunal.